El queso mozzarella es uno de nuestros favoritos para acompañar pizzas y pastas. Este es un estilo de queso suave y fibroso de la familia de la pasta hilada, que incluye otros quesos como el Queso Oaxaca y el Caciocavallo.
Pasta filata se traduce como pasta hilada, refiriéndose al método de amasar y estirar que se usa para crear las distintivas bolas de mozzarella que encontramos en la tienda y el supermercado.
Todos los quesos se elaboran de la misma forma general. Comienzan su vida como leche de vaca, cabra u oveja y una vez que se elimina toda el agua, deja un queso. A partir de ahí, se utilizan diferentes procesos para crear todos los quesos que conocemos y amamos. La mozzarella es un queso fresco, lo que significa que debe comerse bastante pronto después de su formación y, por lo general, tiene un sabor suave y ligeramente agrio.
Mozzarella y pizza
La mozzarella es el queso que más vas a encontrar en la pizzería, y hay una buena razón, además es científica. Cuando la mozzarella se calienta en el horno, todo su contenido de agua hierve y luego se evapora. Este proceso crea una burbuja dentro del queso que crece hasta que revienta, liberando el vapor recién formado y permitiendo que el queso se dore.
Otros tipos de queso tienen demasiado aceite o muy poco contenido de agua para formar las burbujas necesarias para permitir que el queso se dore correctamente. La química de la mozzarella la convierte en una base esencial para cualquier pizza.
El origen del queso mozzarella
La mozzarella se desarrolló por primera vez en el sur de Italia ya en el siglo I d. C., aunque la forma más antigua del queso probablemente se hizo con leche de oveja. La historia cuenta que se hizo por primera vez por accidente cuando unas pocas cuajadas de queso cayeron en un cubo de agua caliente. También hay una historia del siglo III d.C., en la que se registró a los monjes de San Lorenzo di Capua repartiendo pan a los lugareños con un queso que llamaron “mozza”.
Es posible que nunca sepamos cómo comenzó el queso mozzarella en Italia, pero sí sabemos que no abandonó esa región en particular hasta el siglo XX, cuando la tecnología de refrigeración avanzó lo suficiente como para permitir que el queso se transportara por todo el mundo.
Fue así que poco a poco el queso mozzarella fue llegando a todos los rincones del mundo. Cuéntanos en los comentarios si este es tu queso favorito.
